Tarta de salmón, ricotta y espárragos verdes.
Las tartas saladas son de los platos más socorridos ya que te pueden sacar de un apuro en un plis plas. Se les puede echar prácticamente de todo y están buenísimas tanto frías como calientes. En este caso hemos preparado una un poco más ligera de lo normal ya que hemos sustituido la nata por el queso ricotta. El resultado, espectacular, os lo aseguramos.
¿Qué necesito?
Para la masa:
250 gr de harina
150 gr de mantequilla a temperatura ambiente
1/2 cucharadita de sal
50 ml de leche
Para el relleno:
100 gr de salmón ahumado
4 huevos
250 gr de queso ricotta
1 bote de espárragos verdes
1 puerro
1 cucharada de zumo de limón
Aceite de oliva
Sal
Pimienta negra
¿Cómo lo hago?
Primero preparamos la masa. Se trata de una masa quebrada y aquí tenéis nuestra receta.
Cuando la tengamos lista, la extendemos en el molde que vayamos a usar y recortamos los bordes para que encaje perfectamente.
Precalentamos el horno a 180º.
Ahora prepararemos el relleno.
En un bol grande batimos los huevos y les añadimos la ricotta y el zumo de limón.
Lavamos y cortamos el puerro en rodajas. En una sartén con un poco de aceite de oliva, lo salteamos hasta que esté blando pero no dorado.
Mientras tanto, abrimos el bote de espárragos, reservamos algunas de sus yemas para decorar y el resto los picamos y los añadimos a la mezcla de queso y huevos junto con el puerro, y el salmón ahumado cortado en trozos pequeñitos. Salpimentamos.
Vertemos el relleno dentro de la masa.
y horneamos a 180º durante unos 40 minutos.
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