El curioso nombre de este plato viene de una pequeña anécdota familiar. Mi madre solía hacer el pisto con judías y sobras de carne del día anterior, sobre todo de cocido (si hay algún gallego en la sala, sabrá de qué estoy hablando). Un día preparó todos los ingredientes y, cuando fue a buscar la carne, se dio cuenta de que no había (mi hermano había atacado la nevera) y decidió usar atún para sustituir la carne desaparecida.
Cuando llegó mi padre del trabajo preguntó qué había de comer y la respuesta de mi madre fue que iba a haber pisto pero que al final nos teníamos que conformar con un pisto de pobres.
En realidad el cambio nos gustó tanto a todos que desde aquella este plato se hace como una forma más de comer judías y no como comida de aprovechamiento.
¿Qué necesito?
500 gr de judías verdes
2 patatas
1 lata pequeña de tomate triturado
1 cebolla pequeña
1 lata de atún en aceite de oliva
Aceite de oliva
Sal
1 huevo (opcional)
¿Cómo lo hago?
Para empezar vamos a lavar y a cortar las judías para después cocerlas en abundante agua durante unos 40 minutos.
Mientras preparamos las judías aprovechamos para hacer la salsa de tomate. En un cazo, ponemos la cebolla cortada y la sofreímos en un poco de aceite de oliva. Cuando esté transparente, añadimos la lata de tomate triturado. Esperamos a que levante hervor, bajamos el fuego y dejamos que se haga durante una media hora (vigilando que no se seque, si es así, añadimos un poco de agua).
Ahora vamos a preparar las patatas. Las pelamos, cortamos en rodajas (o como para tortilla) y las freímos. Una vez fritas les escurrimos bien el aceite y las colocamos en un bol.
Cuando el tomate esté listo le añadimos la lata de atún escurrida (si no os gusta encontraros los trozos de cebolla, batid la salsa antes de añadir el atún)
Una vez cocidas, escurrimos y añadimos las judías a las patatas y por último, la salsa de tomate con el atún.
Si queréis, podéis completar el plato con un huevo cocido y picado. A mí me gusta mucho como queda.
Revolvemos todo y servimos. Ya tenemos listo un plato sencillo y sabroso.
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