La mermelada de coco no es muy habitual en Europa, pero sí es muy típica en la cocina caribeña. No se trata de una mermelada al uso, como estamos acostumbrados, pues la textura es algo peculiar y es menos untuosa de lo habitual. Pero si os gusta el coco, esta mermelada puede convertirse en la nueva reina de vuestros desayunos.
¿Qué necesito?
1 coco
250 gr. de azúcar moreno
1 rama de canela
1 pizca de nuez moscada
500 ml. de agua
¿Cómo lo hago?
Lo primero que necesitamos es la pulpa de coco, así que toca abrir el coco. Como nosotras no somos muy fans del martillo, para abrirlo utilizamos la técnica del horno, que además nos permite separar la pulpa con muchísima facilidad (véase la foto de arriba). Y esta técnica consiste simplemente en introducir el coco (después de haberle vaciado el agua) en el horno precalentado a 200º hasta que se agriete. Esto le llevará entre 10 y 15 minutos. De esta forma, se romperá la cáscara y podremos retirar la pulpa con muchísima facilidad.
El siguiente paso consiste en triturar la pulpa en el accesorio picador de nuestra batidora hasta obtener una textura lo más fina posible.
Calentamos el agua junto con el azúcar moreno, la rama de canela y la nuez moscada. Cocinamos a fuego fuerte hasta que comience a hervir y dejamos fundirse el azúcar durante 3 minutos. Pasado este tiempo, incorporamos el coco triturado y removemos con una espátula. Dejamos cocinarse todo a fuego suave durante 40 minutos.
¡Y listo! Solo nos queda rellenar el bote previamente esterilizado con la mermelada de coco y consumirla con moderación.
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